Soliz Baldomar, R. L.

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Vol. 7, núm. 20 / mayo agosto del 2022

Discusión

La mayor población pertenece al género femenino un 69% es importante recalcar las consideraciones de Sánchez (2010), cuando afirma que las mujeres trabajadoras asumen doble jornada laboral, ya que el salir de su hogar y unirse a la fuerza laboral para mejorar sus condiciones de vida y las de su familia, y que a pesar de su entusiasmo por abrirse a nuevas oportunidades de trabajo y estudio, no pueden desligarse de sus labores domésticas en casa, en tanto es muy probable que generen niveles elevados estrés y fatiga laboral.

La cantidad de trabajadores operativos solteros es mucho mayor que los casados, viudos, separados y en unión libre. Por lo cual, Villegas y Santamaría (1999), comentan que los sujetos casados suelen tener un estilo de vida más estable y una perspectiva de vida mejor que la de los solteros, considerando, además, que los sujetos solteros podrían tender a usar el trabajo como fuente de vida social y esto le llevaría a implicarse excesivamente con la gente del ámbito laboral, por tanto, a un mayor riesgo de sufrir de síndrome de quemarse en el trabajo, entre otros aspectos que sobreponen niveles de estrés en este tipo de trabajadores.

A lo anterior se unen los mayores porcentajes de personas con un estrato social que van desde el nivel 3 hasta el nivel 1, lo cual devela que su condición económica es más comprometida y de necesidades de supervivencia mayor a los demás, lo que a su vez contribuye en la manifestación del estrés en general. Londoño et al. (2010), explican que los problemas de vivienda son un factor de riesgo para la depresión, dado que la falta de hogar, de vivienda adecuada, el vecindario insalubre, los conflictos de vecinos o

propietarios, son condiciones básicas y al no tenerlas resueltas en la edad adulta se vive como una pérdida de ideales y puede afectar el estado de ánimo.

En el contexto mexicano, estos problemas también se refieren a la dificultad para llevar al día los créditos hipotecarios, y los gastos ligados a la vivienda, como el alto porcentaje del salario que ocupan los servicios públicos. La depresión se produce por pérdida de personas, objetos e ideales, ya que poseer vivienda es un ideal social en esta cultura.

En cuanto al Desplazamiento vivienda-trabajo- vivienda, el porcentaje de factor de riesgo asociado en la población de estudio, evidencia niveles que sobrepasan al 75% cuando se suman los niveles bajo, medio, alto y muy alto. Esta situación, de acuerdo con lo planteado por Gutiérrez y García (2005), aumenta el nivel de estrés en los trabajadores. Igualmente, el factor económico se evidencia en niveles de factor de riesgo que elevan el estrés de los trabajadores, cuando las cifras en porcentajes sobrepasan más del 75%, lo cual agrupa los niveles que requieren intervención, como lo son bajo, medio, alto y muy alto, por su parte Gómez y Rodríguez (1997) indican que un factor importante para que se manifieste la depresión está relacionado con los ingresos familiares.

El personal operativo de estas empresas industriales en Guadalajara está expuesto a los factores de riesgo psicosocial extralaboral y niveles de estrés significativos, que desprenden una alerta, frente a las orientaciones ministeriales sobre los problemas epidemiológicos derivados de los resultados, a partir de los cuales las empresas pueden encaminar su gestión con la intervención oportuna, para, solventar las situaciones emergentes y de convivencia armónica para todos.