García Padrón, Y., y Acosta, D. B.
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Vol. 7, núm. 20 / mayo – agosto del 2022 DOI: https://doi.org/10.36791/tcg.v8i20.163
Pp. 82-120
capitales invertidos. Esto es, siendo RN el resultado neto y RP los recursos propios. La misma ha sido objeto de estudio por diversos autores, tales como: Azeez (2015, p. 184), Pindado y Alarcón (2015, p. 52) y Arouri et al (2010, p. 91). Además, con el fin de realizar un análisis más profundo de la rentabilidad financiera, y en consonancia con Aguiar y Torres (2012, p. 140), Díaz et al. (2011, p. 93), Maroto et al. (2006, p. 170) y Maroto y Verona (2006, p. 135), entre otros, se aplica el método sumativo. En concreto se descompone la rentabilidad financiera (RF) en sus factores determinantes (rentabilidad económica-RE, efecto
apalancamiento-EA, efecto fiscal-EF).
La rentabilidad económica es un indicador de la gestión económica, siendo independiente de cómo están financiadas las inversiones, la cual se obtiene por la división entre el resultado antes de intereses e impuestos
(RAIT) y el activo total (AT), esto es, . La rentabilidad económica ha sido empleada por múltiples autores como Cedrés y Díaz (2020, p. 97), Aguiar (2017, p. 94), Pindado y Alarcón (2015, p. 50), Maroto et al. (2006, p. 170), y Amat (2005, p. 33), siendo este último quien destaca la importancia de la rentabilidad económica para interpretar si una empresa no es rentable por problemas en el desarrollo de su actividad económica.
Para medir el impacto de la deuda en la rentabilidad financiera se analiza el efecto apalancamiento, medido como e, de acuerdo con Sánchez (2020, p.137), Aguiar y Torres (2012, p. 140). Si el apalancamiento financiero toma un signo positivo tendrá un impacto favorable, indicando que, a medida que la empresa se endeuda, aprovecha dicho endeudamiento para generar una mayor rentabilidad a los accionistas, ya que, obtiene una rentabilidad mayor por la gestión de sus activos que el coste de financiación para el uso de éstos. Si, por el contrario, el signo resultante es negativo es un indicador de que los accionistas recibirán una retribución inferior que la que realmente genera la actividad empresarial, indicando que la adquisición de deuda ha tenido un impacto desfavorable, pues el coste de la deuda es superior a la rentabilidad obtenida.
Por último, el efecto fiscal ( t ) tiene por objetivo representar el impacto que tiene el Impuesto sobre Sociedades en la rentabilidad financiera de la empresa, así como evidenciar si las empresas consiguen disminuir su carga fiscal. El efecto fiscal, así como el tipo impositivo efectivo ha sido investigado por múltiples autores, entre los que cabe citar a Pitulice et al. (2016, p. 206, p. 216) y Kraft (2014, p. 1).
Las siglas utilizadas y la determinación de las variables pueden consultarse en la tabla 11.