Gracida De la Rosa, E. M.

122

Vol. 7, núm. 20 / mayo agosto del 2022

Abstract

To know a bakery ’s workplace well-being in Hermosillo, Sonora, Mexico, the company was analyzed using as determining factors the organizational climate, dependence of psychological distress and social dysfunction. This was done using Litwin and Stringer ’s Organizational Climate Questionnaire [LSOCQ] and David Goldberg ’s 12-item General Health Questionnaire [GHQ-12].

The instruments were applied to the workers the first half of 2020 and the sample consisted of 16 people. At the moment of the investigation, the bakery got a favorable score at the Organizational Climate Questionnaire, and the results on the General Health Questionnaire shown that the workers had a healthy mental health. With the results it was corroborated that the workers were working under a good workplace well- being.

Keywords: diagnosis, workplace well-being,

organizational climate, mental health.

Introducción

En México, del 90 al 98% de las empresas entran en la categoría de pequeñas y medianas empresas [PYMEs] y aportan alrededor del 70% de los puestos de trabajo (Segura, 2018). Dentro de este porcentaje no todas se encuentran formalizadas, y las que lo están en su mayoría no cuentan con un modelo de clima laboral a seguir, y es la óptima gestión de un clima laboral uno de los factores que influye a que exista un mayor bienestar laboral dentro de las organizaciones.

A esto hay que sumarle otros datos que influyen negativamente en la calidad de vida de los trabajadores. Por citar algunos, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE por sus siglas en

español y OECD por sus siglas en inglés, muestra, en su base de datos de los países con jornadas laborales más extensas, a México en primer lugar en su indicador del 2018 (OECD, 2019a) y así mismo, en su base de datos sobre el salario promedio, México aparece con el promedio más bajo a comparación de los demás países (OECD, 2019b).

Este desequilibrio de horas laborales extensas y la presión de poseer un salario bajo, genera enfermedades y otros problemas a los empleados, llegando al extremo de que mueran por exceso de trabajo, un fenómeno que escaló hace algunos años en Japón y al que se le llegó a asignar un término, karoshi , y en 1987 fue reconocido por el Ministerio de Salud japonés (Gorvett, 2016).

Estos últimos datos son importantes a considerar ya que, en el indicador de jornadas laborales más extensas de la OECD, Japón se encuentra veintidós lugares por debajo de México (OECD, 2019b) y, según se puede leer en artículos de la revista Forbes, México tiene un elevado índice de estrés laboral (Forbes México, 2019a).

Visto desde la perspectiva del empresario este problema repercute en la productividad de las empresas. En el 2016 se dio a conocer que los problemas psicosociales en el trabajo, entre los que entran la fatiga crónica, el estrés, la ansiedad, por mencionar algunos, ocasionaron pérdidas de hasta 16 millones de pesos en el sector productivo (Forbes México, 2016).

También, en el 2019 la Organización Mundial de la Salud [OMS] reconoció al Síndrome del Burnout, conocido a su vez como el Síndrome del Quemado o Síndrome de Agotamiento Laboral, como una enfermedad. Su diagnóstico se pondrá en vigor a partir del 2022 y el síndrome está asociado al agotamiento mental, emocional y físico resultado por el trabajo. La OMS lo define como un: